Última actualización: 02/08/2017
“Apenas llegó
se instaló para siempre en mi vida.
No hay nada mejor
que encontrar un amor a medida”
Este es el estribillo de ‘Rebajas de enero’, una de las grandes canciones que escribió ese alquimista de las palabras que se llama Joaquín Sabina (el video entero, al final del artículo).
Estos cuatro versos resumen la relación que muchos tenemos con Facebook. Llegó sin darnos cuenta, se instaló en nuestras vidas y ahora es (casi) imposible deshacernos de ella.
Porque esta red social cada vez es más lista y solo tiene un objetivo: que todo lo hagamos en Facebook, que permanezcamos el máximo tiempo posible dentro de ella y que solo salgamos para ir al baño. Y, a veces, ni eso. Porque muchos usuarios se van al retrete con su móvil.
Porque Facebook quiere que toda nuestra vida gire alrededor de Facebook: que vivamos en Facebook.
¿Qué vas a encontrar en este artículo?
Vacaciones, el niño y el gato
En Facebook nos enteramos de lo que le sucede a nuestros amigos: si se han ido de vacaciones, les han ascendido de trabajo, han tenido un niño o un gato. A través de Facebook nos enteramos de cuándo es su cumpleaños, y ya no les felicitamos con una llamada de teléfono como antes. No. Les podemos dejar una felicitación en su muro.
En Facebook también contamos parte de nuestra vida: unos más que otros. Tenemos nuestro carrete de fotos con las imágenes que hemos ido subiendo durante los últimos años… Y hasta videos.
En Facebook nos informamos de la actualidad, seguimos las páginas de empresas o de personalidades que nos parecen interesantes, pertenecemos a grupos (unos privados y otros públicos), podemos crear eventos para invitar a nuestros amigos… Y hasta nos ponen nuevos emoticones.
En fin, todo lo podemos hacer en Facebook. Hasta jugar al Candy Crush.
Ya hay aplicaciones que nos dicen el tiempo que hemos pasado en Facebook desde que nos dimos de alta.
Nuevas funcionalidades
En ese afán de querer que todo lo hagamos en Facebook, la red social acaba de incorporar la posibilidad de que cada uno de nosotros (a través del móvil) podamos retransmitir en directo cualquier acontecimiento. Seguro que a la gente de Periscope, la aplicación de video online de Twitter, no le ha gustado nada este movimiento.
También quiere que los aficionados al deporte no se vayan de Facebook. Por eso está a punto de presentar Sport Stadium, un lugar dentro de la red social para seguir los acontecimientos deportivos con tus amigos.
Y no solo quiere que los usuarios hagan todo en Facebook. Por ejemplo, también ha invitado a los medios de comunicación, sobre todo a los periódicos, a que publiquen sus informaciones de forma directa en la red social, sin ningún enlace a las páginas webs de esos diarios.
Todo ya está dentro de Facebook. Messenger ya está incrustado dentro del ecosistema de Facebook. Y dentro de poco les tocará el turno a Instagram y a WhatsApp.
En breve también incluirá la posibilidad de comprar, vender y realizar transacciones económicas dentro de Facebook. Siempre con el objetivo de que no salgamos de la red social.
Escribí algo más sobre esta obsesión que tiene Facebook de querer que nos quedemos a vivir en Facebook en el artículo que publico todas las semanas en La Opinión A Coruña.
Pincha en la imagen para ampliarla
Leer el artículo original en la web
Imagen de la cabecera del post cortesía de Geralt en Pixabay